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Tal como lo había hecho la Comisión de Trabajo previamente, la sala del Senado aprobó por unanimidad la idea de legislar sobre el proyecto, en segundo trámite, que otorga un permiso laboral de 7 días a los trabajadores en los casos en que fallezca un familiar directo.

Con ello, la iniciativa quedó en condiciones de ser remitida nuevamente a la citada instancia parlamentaria, para su estudio en particular, por lo que se fijó plazo hasta el 30 de octubre para presentarle indicaciones.

Al momento de informar el proyecto, el presidente de la Comisión de Trabajo, Juan Pablo Letelier, recordó que esta iniciativa fue originada en una moción de un grupo de diputados, para establecer que en el caso de la muerte de un hijo o del cónyuge, todo trabajador tendrá derecho a siete días corridos de permiso pagado, adicional al feriado anual, independientemente del tiempo de servicio.

Agregó que también se estableció entregar un permiso de tres días hábiles, en el caso de muerte de un hijo en período de gestación así como en el de muerte del padre o de la madre del trabajador.

Paralelamente, en los casos de muerte de un hijo o del cónyuge, el trabajador gozará de fuero laboral por un mes, y en el caso de trabajadores con contratos a plazo fijo o por obra o servicio determinado, el fuero los amparará sólo durante la vigencia del respectivo contrato si éste fuera menor a un mes, sin que se requiera solicitar su desafuero al término de cada uno de ellos.

Valoran proyecto

En tanto, los senadores Hosaín Sabag y Andrés Allamand, valoraron los alcances de la iniciativa, argumentando que "va en la línea correcta", pero anticiparon que presentarán indicaciones para perfeccionar algunos aspectos.

El senador Sabag destacó que "este proyecto no sólo considera aspectos laborales, sino que aspectos humanitarios" que muchas veces son dejados de lado al momento fijar ciertas normas.

En ese sentido, hizo presente la importancia que tendrá este proyecto una vez que esté en aplicación, toda vez que "alrededor del 50% de las personas que han sufrido la pérdida de un hijo o del cónyuge, pierden su empleo antes de transcurridos 8 meses" a raíz del fuerte impacto emocional que ello les provoca.

Por su parte el senador Allamand manifestó que esta iniciativa "tiene que ver con el esfuerzo permanente de generar grados de humanización en las condiciones laborales y va en la línea correcta", pero advirtió que es necesario precisar algunos aspectos del proyecto.

Entre ellos, acotar la forma en que se determinará cuando se está frente a la muerte de un hijo en periodo de gestación y no ante una pérdida de los primeros meses; revisar si el fuero es pertinente en estas situaciones y estudiar en profundidad los efectos laterales indeseados.