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Ante un centenar de oyentes sumamente atentos a sus palabras, el subdirector del Trabajo, Rafael Pereira, expuso este miércoles en la Universidad San Sebastián sobre los principales aspectos del derecho del trabajo.

Pereira fue invitado por el Centro de Educación Ciudadana de la Facultad de Derecho de ese plantel en el marco de su ciclo 2016 del programa "Ciudadanos Cívicamente Aptos", que pretende acercar a la ciudadanía asuntos de vigente actualidad y alto interés público.

Es así como desde el 1 de junio y a lo largo de siete charlas los asistentes -cuya amplia diversidad confluye en un interés común por el conocimiento cívico- han aprendido de temáticas como familia, seguridad social y trabajo seguro y sano, ahorro y deuda, derechos y obligaciones del consumidor, transparencia, derechos y obligaciones del paciente y derechos y obligaciones del trabajador, expuesto esto último por el subdirector del Trabajo. El ciclo será cerrado con el tema de insolvencia y reemprendimiento, tras lo cual, en un posterior acto de clausura, los fieles concurrentes a estas charlas recibirán un diploma de asistencia.

En la jornada de este miércoles, que se prolongó por dos horas y media, el director del centro organizador, el jurista Luis Bates, planteó que el trabajador debe entender al trabajo con un sentido trascendente y no solo como un mero vehículo para ganarse la vida. Con ello, ahondó, no solo contribuye al bien social sino que también le da a su labor un sentido de trascendencia superior a lo cotidiano.

Pereira, en tanto, centró su exposición en cuestiones preliminares, derechos individuales, colectivos y fundamentales y en las obligaciones de trabajadores y trabajadoras.

Hizo hincapié en que el derecho del trabajo, que tan normal aparece ahora a ojos contemporáneos, fue el fruto de largas y durísimas luchas dadas por los trabajadores que comenzaron a dar resultados recién en la primera mitad del siglo 19 en Inglaterra y Francia y a principios del siglo 20 en América.

El hito más importante de esta difícil evolución del derecho del trabajo, dijo, es el Tratado de Versalles, en 1919, que en uno de sus capítulos creó la Organización Internacional del Trabajo.

Con la consolidación del derecho del trabajo, explicó el jurista, las relaciones laborales pasaron a tener un estatus de equilibrio del que carecía cuando eran reguladas por el derecho civil y comercial. "La finalidad principal de esta nueva rama del derecho fue dar protección a la parte más débil de la relación laboral", dijo.

Al entrar en los otros aspectos de su exposición, Pereira enfatizó que el empleador puede actuar usando atribuciones que le concede la ley, que están rigurosamente delimitadas para impedir abusos.

Un aspecto central de su charla fue el derecho colectivo, del cual dijo que es la consolidación del equilibrio de poderes que debe existir en la relación laboral. Recalcó, eso sí, que para ello es indispensable la existencia y el respeto a la libertad sindical, que concede a los trabajadores la posibilidad de organizarse sindicalmente, negociar e ir a huelga. Este es el espíritu, finalizó, que inspira la reforma laboral que impulsa el Gobierno.