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Lo que prometía ser un período tranquilo luego de firmarse el contrato colectivo que rige desde septiembre último, no lo ha sido tal en la línea aérea Sky Airline S.A., a juicio de su sindicato de pilotos.

Ello, porque la organización y la empresa han diferido desde entonces en dos cláusulas primordiales del contrato.

Así lo hizo ver la directiva de la organización al reunirse con el director del Trabajo, Christian Melis, para pedir un pronunciamiento del servicio fiscalizador e intérprete de la legislación laboral.

José Domingo Márquez, presidente; Leopoldo Estay, secretario, y Fernando Bohmwald, tesorero, ingresaron una solicitud formal explicando que la empresa ha tergiversado el sentido del contrato en cuanto a la naturaleza variable o fija de las remuneraciones y el pago de horas vuelo programadas y también al pago y compensación de las horas trabajadas en tierra.

Márquez reprochó que Sky Airline S.A. considere que las remuneraciones son fijas, cuando las propias cartolas de pago demuestran lo contrario. Explicó que el criterio de la empresa afecta los montos de diversos bonos.

Asimismo, cuestionó que Sky Airline S.A. limite a dos funciones específicas el pago del bono por funciones en tierra, en circunstancia que el propio contrato lo hace extensible a cualquier tipo de función.